CAPEL solicita suspensión temporal de operaciones en planta de Sotaquí debido a prolongada sequía en el Limarí
A pesar de la suspensión temporal, CAPEL propone mantener el sistema de tratamiento de efluentes líquidos mediante filtros fitoterrestres con agua de canal durante todo el periodo de paralización de operaciones.
La Cooperativa Agrícola Pisquera Elqui (CAPEL) ha presentado una solicitud de Pertinencia Ambiental al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) bajo el nombre «Baja de Operaciones Planta Agroindustrial Sotaquí«. En este documento de 17 páginas, CAPEL propone la suspensión temporal de diversos procesos en su recinto ubicado en Ovalle, provincia de Limarí.
La razón principal detrás de esta pausa es la sequía que ha afectado la región durante más de 12 años, provocando una significativa disminución en la producción de uvas en el valle de Limarí. Los procesos que se detendrán temporalmente incluyen la recepción, molienda, maceración, prensado, decantación, flotación, filtrado, fermentación y guarda, todos relacionados con la elaboración de mostos y vinos.
A pesar de la suspensión temporal, CAPEL propone mantener el sistema de tratamiento de efluentes líquidos mediante filtros fitoterrestres con agua de canal durante todo el periodo de paralización de operaciones. También plantea reducir al mínimo el control de monitoreo de RILES (Residuos Industriales Líquidos).
La baja en la producción de uvas en el valle del Limarí llevará a CAPEL a destinar las uvas a otras plantas de la cooperativa ubicadas en el valle. Esta reorganización busca optimizar recursos al centralizar la recepción y molienda de uvas en las plantas del sector costero del valle, generando ahorros significativos en energía, horas hombre y recursos en general.
En un comunicado, CAPEL explicó: «Debido a la baja en la producción de uvas en la zona del valle del Limarí, generada por la condición de sequía imperante desde hace más de 12 años, la producción de uvas destinadas a planta Sotaqui será destinada a otras de la Cooperativa ubicadas en el valle«.
El documento también revela que con un funcionamiento mínimo del sistema de tratamiento de RILES, las aguas tratadas se descargarán al estanque de riego y luego se utilizarán para regar un bosque propio, cumpliendo con lo establecido en la RCA N° 6/2006. El agua de canal proporcionará la humedad necesaria para el mantenimiento de las especies vegetales y los microorganismos presentes, complementados con aplicaciones controladas de enraizantes mezcladas con aportes de nitrógeno y fósforo.