
Instalarán cierre perimetral en el nuevo Espejo de Agua de Ovalle
El municipio de Ovalle invertirá recursos propios por un monto cercano a los 11 millones de pesos, que servirán para la colocación de un cierre perimetral, para la protección del Espejo de Agua de la Alameda local. Los trabajos se iniciaron el pasado 29 de marzo y se prolongarán por 40 días.
Una de las obras que ha marcado a la actual administración municipal, encabezadas por el alcalde Claudio Rentería, ha sido el mejoramiento del Espejo de Agua de la Alameda de Ovalle, que es uno de los sectores más característicos de la denominada Perla del Limarí. Estos trabajos permitieron dotar el paseo público de juegos de agua y luces, que cientos de ovallinos disfrutan diariamente.
Ahora se realizarán nuevas labores, las cuales consisten en la confección e instalación de una reja perimetral, que cubrirá todo el perímetro de la fuente de agua. La iniciativa tiene un costo de $10.999.836, que será financiado con recursos propios del municipio de Ovalle. Los trabajos comenzaron el pasado 29 de marzo y la empresa Ingeniería y Construcción HMG tendrá un plazo de 40 días, para llevarla a cabo.
La obra consiste, específicamente, en la instalación de rejas de acero con pintura anti oxido, las cuales serán curvas y tendrán una extensión de un metro y medio de ancho y una totalidad de 90 metros lineales. Además, contará con una puerta de acceso en el área de sala de máquinas, que es donde se encuentran los controladores de los sistemas de luces y agua del Espejo de Agua.
El alcalde Claudio Rentería recalcó que uno de los principales lineamientos de la administración municipal es el “mejoramiento de nuestros espacios públicos y esta obra es parte de este trabajo. La Alameda, junto a la Plaza de Armas, son nuestros principales paseos y estos deben estar en perfectas condiciones, porque son la imagen de la ciudad”.
La idea principal de la construcción del cierre perimetral es evitar el ingreso de personas a la pileta, tanto por el cuidado de los equipos, como también para proteger la integridad de las personas, ya que el agua, frecuentemente, se expone a productos químicos y además el área cuenta con sistemas eléctricos que podrían afectar a quienes por algún motivo decidiera ingresar a la fuente.