La Memoria Infinita triunfa en los Goya 2024
En la previa, y tal como ocurrió en el Festival de Berlín, hace un año, y en diferentes hitos durante los últimos 12 meses, la exministra de Cultura resaltó la perspectiva de la autora de Los niños (2016).
Hace tres años, cuando estuvo nominada por El agente topo (2020), Maite Alberdi no pudo viajar a España a la ceremonia de los Goya. En esa ocasión, en plena pandemia, la gala se desarrolló en formato telemático, privando a la realizadora chilena y al resto de los candidatos del rito habitual asociado a la entrega de premios que organiza la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España.
Este sábado la directora nacional tuvo su revancha. Gracias a la tercera nominación de su carrera al evento, Alberdi acudió a la 38° edición de los galardones, realizada en Feria de Valladolid, al noroeste de ese país. Esta vez llegó junto a la actriz Paulina Urrutia, la protagonista de La memoria infinita, su conmovedor filme sobre su historia de amor junto al periodista Augusto Góngora.
Y en esta ocasión la cineasta alzó el reconocimiento a Mejor película iberoamericana, convirtiéndose en la primera chilena en obtener el premio. Las otras realizadoras que habían aspirado al premio habían sido Marcela Said (Los perros) y Manuela Martelli (1976), además de la propia Alberdi, candidata por La once y El agente topo.
La directora comenzó su discurso realizando una alusión a que “Chile ha pasado por varios días de duelo nacional”. “A mí La memoria infinita me ha enseñado diferentes formas de vivir los duelos, personales y colectivos. Este año me ha tocado ver a la Paulina presentando la película en medio de su pérdida, conversando su dolor con el público y asumiendo un duelo compartido. Creo que de la misma forma enfrentó el Alzheimer, sin esconderse, hablando del tema, visibilizándolo y asumiendo que tenía que estar en el mundo”, señaló ante el público.
“Su marido, Augusto, por su parte, decía que la forma de reconstituir la memoria colectiva no era desde las cifras ni desde la información, sino que desde la memoria emocional. Incluso cuando perdió la memoria siempre recordó sus dolores y sus amores. La memoria histórica se construye narrando y compartiendo el dolor. Muchas gracias, Paulina y Augusto, por tantas lecciones de amor”,
En la previa, y tal como ocurrió en el Festival de Berlín, hace un año, y en diferentes hitos durante los últimos 12 meses, la exministra de Cultura resaltó la perspectiva de la autora de Los niños (2016).
“Tener una mirada aguda como la de Maite, una mirada sensible, delicada, cuidadosa, con nosotros, que somos materiales del documental, yo creo que es una gran enseñanza para el cine”, expresó Urrutia en la alfombra roja. Alberdi, quien también llegó en compañía de la productora Rocío Jadue, apuntó: “Yo creo que esa es la gracia de los premios, que a las directoras y a los directores nos regalan la posibilidad de seguir filmando, y de celebrar a la cinematografía iberoamericana en general”.
En tanto, en el recuento general, La sociedad de la nieve dominaba con holgura la ceremonia, acaparando distinciones como Mejor fotografía, Mejor montaje y Mejor actor revelación (Matías Recalt).