Muerte masiva de abejas en la región pondría en riesgo industria agroalimentaria del país
Un 70% de los cultivos de Chile dependen de la polinización de la abeja para su desarrollo.
La muerte masiva de abejas en Monte Patria alertó a los apicultores de la zona sobre una situación que se viene repitiendo desde hace años, no sólo en ese sector, sino en gran parte del planeta, como es la crítica disminución de la población de este pequeño insecto.
En el caso particular de Monte Patria, los afectados apuntan al uso de pesticidas en los campos cercanos a las colmenas, como los causantes de la alta mortandad entre sus abejas.
Pero en el rubro agrícola están conscientes de que esta situación es compleja, porque generar la muerte de estos insectos es como “dispararse a los pies”, porque ellas son los principales responsables de la polinización de una gran variedad de cultivos y plantas silvestres, y su vuelo, de flor en flor, sostiene la producción de alimentos en el mundo.
Sin embargo, pese a esta importancia vital para el ecosistema, se registra una disminución alarmante de las poblaciones de abejas en los últimos años. Y factores como la sequía, el uso indiscriminado de pesticidas y la pérdida de su hábitat han puesto en peligro a estos polinizadores.
En ese contexto, según la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), en la región se registran 46 mil colmenas y 590 apicultores, de los cuales, el 32% presta servicios de polinización. Por ello, lo que está ocurriendo en Monte Patria encendió las alarmas, pues la merma de la población de abejas puede derivar en una escasez, no sólo de alimentos, sino en un declive de las plantas y animales herbívoros, lo que a su vez, afecta a todos los ecosistemas planetarios.
En efecto, según un estudio de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), un 70% de los cultivos de Chile dependen de la polinización de la abeja para su desarrollo.
RIESGO EN LA PRODUCCIÓN AGRÍCOLA
Así lo ratifican expertos como Bárbara Fuentes Siegmund, académica del Departamento de Ingeniería Química y de Medio Ambiente de la Universidad Católica del Norte, quien señala que, sin las abejas, se pone en riesgo la producción agrícola.
“Como van de flor en flor, se alimentan del néctar y el polen. Ellas las trasladan en los pelos de sus patitas y van permitiendo que se reproduzcan las especies. Si disminuye su cantidad por supuesto que no habrá polinización y eso pone en riesgo todo el sistema. Si no existen estas especies vegetales se ponen en riesgo todos los animales asociados a ellos, generando un daño y una alteración significativa”, señaló Fuentes.
La académica de la UCN afirmó que los insectos, y abejas en particular, están muy expuestos a las condiciones del medio, por lo que sufren una afectación importante cuando hay algún tipo de contaminación o si existe aplicación de productos químicos.
“Cuando se aplican estos productos para fumigar o algún otro tipo de agroquímico en altas concentraciones podría afectar a las abejas. Hay algunos compuestos de los químicos que son neurotóxicos para los insectos”, señaló la experta.
En ese sentido, es fundamental ver qué está pasando en los sectores donde se está generando la muerte de abejas y tomar medidas.
“Si hay algún tipo de contaminación o una aplicación industrial de algún compuesto, o si hay algún cambio de condiciones climáticas extremas, eso podría afectar la vida de los insectos y de las abejas”, aseveró Fuentes.